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CAPÍTULO 55 - RECHAZAR LA CABALLEROSIDAD

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Mensaje  francisco de Sales Lun Nov 30, 2020 12:11 am

CAPÍTULO 55 - RECHAZAR LA CABALLEROSIDAD
- LO QUE NO ES APROPIADO -
 
Este es el capítulo 55 de un total de 200 –que se irán publicando-  que forman parte del libro RELACIONES DE PAREJA: TODO LO QUE NO NOS HAN ENSEÑADO Y CONVIENE SABER.
 
 
En algunos casos, no muchos afortunadamente, una mala interpretación del feminismo está haciendo tomar a algunas mujeres una postura radical que va en contra de ellas mismas.
 
A las mujeres, por lo menos hasta ahora, siempre les han gustado los hombres que se denominan “caballeros”. Esos hombres atentos, educados y con buenos modales, que ceden el mejor asiento, abren y cierran la puerta del coche o de los restaurantes, envían flores, son considerados y puntuales, saben conversar y escuchar…
 
En algunos casos, se están rechazando estos hombres porque algunas mujeres sienten que son tratadas como objetos, que no son valoradas como personas sino como animales cortejados, y eso –en algunos casos- puede ser un error de interpretación.
 
El hombre que se lo permite deja asomar una de sus “responsabilidades genéticas”: la de proteger a la mujer. El hombre que se lo permite siente dentro de sí esa ley no escrita de que la mujer es más débil –aunque sólo lo es físicamente y no siempre- y por eso tiene que colaborar en hacérselo todo más fácil –de ahí proviene una parte de lo que se denomina caballerosidad-, y como ama a la mujer trata de hacerle la vida y sus cosas más agradables.
 
Sería mejor evitar entrar en un enfrentamiento por este motivo. En una ocasión vi la reacción de una mujer porque un hombre le abrió la puerta y le cedió el paso: “¿Te abro yo a ti la puerta?, ¡no!, entonces… ¿por qué me la abres tú a mí?”. Dicho de malos modos, por supuesto.
 
Es un signo de inteligencia, y de hacer que se sienta bien la galantería del hombre, aceptar su caballerosidad y, al mismo tiempo y sin cargo de conciencia, aprovecharse de lo bueno que aporta.
 
Que ningún hombre se escude en su autosuficiencia para no aceptar las atenciones de la mujer, y que ninguna mujer se pierda el placer de ser tratada como se merece por un caballero.
 
SUGERENCIA PARA ESTE CASO:
 
- Recibir bien las amabilidades.
- Permitirse ser bien tratada.
 
Francisco de Sales
 
(Si le interesa ver los capítulos anteriores, están publicados aquí:
http://buscandome.es/index.php/board,89.0.html)

francisco de Sales

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